Con la oleada de despidos que se están produciendo en varias empresas de Estados Unidos, algunos empleados pueden verse implicados si poseen una visa de trabajo.
Trabajar legalmente en Estados Unidos como extranjero es posible gracias a los visados de trabajo H-1B. Este tipo de documento se aprueba para personas que quieran «prestar servicios en un campo especializado, servicios de alto mérito y capacidad sobresaliente para proyectos de desarrollo o investigación cooperativa con el Departamento de Defensa, o como modelo de alta costura o para publicidad de alto mérito o capacidad sobresaliente», según el Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS).
En estos meses, cientos de empresas como Microsoft, Twitter, Meta, Amazon y otras han anunciado despidos masivos en sus oficinas de todo el mundo. Los trabajadores de Estados Unidos no son una excepción. Aunque la pérdida del empleo puede ser un modo de estrés muy diferente entre quienes residen en EE.UU. que para quienes trabajan en el país con un visado de trabajo, como lo es la H-1B.
“Es una situación muy estresante la que se vive ahora. La mayoría de las empresas han congelado la contratación y han despedido a mucha gente”, dijo Pasupulati, ingeniero de software en Cary que lleva ocho años viviendo en EE.UU.
Las personas en su misma situación tienen 60 días para encontrar otro trabajo, según la ley federal estadounidense, o deben abandonar EE.UU. y regresar a su país de origen si no lo consiguen.
¿Cuánto tiempo puede permanecer en Estados Unidos un titular de un visado H-1B?
“Como trabajador cualificado o modelo H-1B, puede ser admitido por un periodo de hasta tres años. La duración de su estancia puede prorrogarse, pero por lo general no puede exceder de seis años, aunque pueden aplicarse ciertas excepciones en virtud de secciones de la Ley de Competitividad Estadounidense en el Siglo XXI”, explica el USCIS en su página web.
En estos casos, el empleador es responsable de todos los costes asociados a este tipo de visado. Y según el USCIS, en caso de despido antes de que finalice este periodo, también debe cubrir los costes de transporte de los empleados contratados de esta forma a sus países de origen.
La oleada de despidos, que se ha producido, sobre todo, aunque no únicamente, en el sector tecnológico, ha dejado a millones de personas sin empleo.