¡ALERTA! La Tormenta que Amenaza con Desatar el Caos en la Costa Este de EE.UU.
El huracán Ernesto, que ha sido clasificado como un huracán de categoría 2, se dirige hacia la isla de Bermudas. Este fenómeno natural, acompañado de vientos fuertes que se extienden a cientos de kilómetros de su centro, ha representado un riesgo potencial considerable para las playas de la costa este de Estados Unidos. Previamente, Puerto Rico y las Islas Vírgenes ya sufrieron su embate, dejando tras de sí cientos de millas afectadas por cortes de electricidad.
CNN informó que Ernesto posee vientos lo suficientemente poderosos como para provocar daños severos. Se anticipa que su centro se aproxime o incluso toque Bermudas el sábado 17 de agosto. Como resultado, las autoridades meteorológicas han emitido una advertencia de huracán para esta isla. El Servicio Meteorológico Nacional (NWS) con sede en Mount Holly, Nueva Jersey, también ha advertido sobre “corrientes de resaca muy peligrosas” que afectarán a la costa este, justo cuando los turistas comienzan a llegar a las playas. Estos fenómenos son conocidos por su fuerza, habiendo sido responsables de al menos 29 muertes en EE.UU. durante este año.
Condiciones Extremas se Aproximan: Lo que Debes Saber
El NWS ha alertado que las olas peligrosas podrían alcanzar hasta 12 metros de altura, equivalentes a aproximadamente 40 pies. Esto afectará a la costa este de Estados Unidos, así como a las Bahamas y nuestro querido Caribe. Se ha reiterado que estas olas ocasionarán mares agitados y corrientes de resaca extremadamente peligrosas.
En Bermudas, CNN ha informado que el impacto de las lluvias y vientos de tormenta tropical iniciará el viernes por la tarde, incrementándose con el paso de la noche y el sábado. Las posibilidades de inundaciones extremas son altas, y el Centro Nacional de Huracanes lanzó una advertencia afirmando que “esto podría generar inundaciones repentinas que pongan en riesgo la vida”. Las precipitaciones se prevén entre 15 y 30 centímetros (6-12 pulgadas), con un posible máximo de 38 centímetros (15 pulgadas) en áreas aisladas.
Aunque el centro del huracán Ernesto no impactó directamente a Puerto Rico ni a las Islas Vírgenes de EE.UU., los vientos del huracán causaron grandes daños eléctricos. En Puerto Rico, LUMA Energy, la empresa responsable de la transmisión y distribución eléctrica, afirmó que “aproximadamente la mitad de los clientes de la isla se encontraron sin electricidad en algún momento del miércoles”. A pesar de los esfuerzos, más de 200,000 personas aún estaban sin servicio eléctrico hasta el viernes.
En las Islas Vírgenes, alrededor del 20% de los clientes seguían sin electricidad, de acuerdo con PowerOutage.us. Las intensas precipitaciones provocaron desbordamientos de varios ríos en Puerto Rico, afectando simultáneamente los procesos de filtración de agua en diversas plantas de tratamiento. Además, se ha informado que más de 250,000 clientes de agua, cerca del 20% del total, se quedaron sin acceso a agua potable el viernes por la mañana.
Según destaca CNN, la intensidad de Ernesto ha sido amplificada por las cálidas aguas del Atlántico, un fenómeno cada vez más frecuente a causa del calentamiento global. No obstante, la presencia de aire seco ha evitado un fortalecimiento explosivo del huracán. Conforme Ernesto continúe su trayectoria hacia el norte, se proyecta que impactará el Atlántico canadiense a principios de la próxima semana, trayendo consigo lluvias y marejadas peligrosas.
Las repercusiones de Ernesto no se limitan a daños materiales y cortes de energía. También representan una seria amenaza para la vida de aquellos que residen y visitan las zonas afectadas. CNN ha enfatizado que “los fuertes vientos y las lluvias torrenciales podrían provocar inundaciones y marejadas ciclónicas que pongan en riesgo la vida”.
Frente a estas amenazas, las autoridades están en alerta constante. Se están realizando esfuerzos para monitorear de cerca el desarrollo del huracán Ernesto, haciendo un llamado a la preparación y precaución en todas las regiones que podrían verse afectadas. El impacto previsto en la costa este de EE.UU. es significativo, especialmente para las comunidades costeras durante el periodo de mayor afluencia turística.